Ubicado en el corazón de Marylebone, el número 8 de Dunstable Mews redefine el concepto tradicional de “Mews”, una tipología tradicional británica de edificios en hilera con establos o cocheras en planta baja y vivienda en las plantas superiores. En ella se han fusionado una estética industrial moderna con un diseño innovador para crear una residencia luminosa y dinámica. La renovación integral está impulsada por el concepto de movimiento, transformando la propiedad en un hogar funcional pero visualmente impactante.
Dunstable Mews
En esencia, el diseño busca evocar una sensación de fluidez y dinamismo, lograda a través de la interacción estratégica de la luz natural, la conectividad visual entre espacios y elementos arquitectónicos dinámicos. Estos incluyen un elevador de coches y un techo acristalado motorizado, que juntos mejoran tanto la funcionalidad como el atractivo estético de la vivienda. Desde el exterior, la abundancia de acristalamiento desde las ventanas de guillotina en fachada hasta la línea de cubierta crea líneas de visión ininterrumpidas, dando la impresión de una estructura sin cubierta inundada de luz.
Un elemento destacado de la renovación es la transformación innovadora del garaje existente, que ahora alberga dos coches gracias a la instalación de un elevador vertical. Esta solución optimiza el espacio, mientras que las ventanas Crittall en la entrada exhiben los vehículos del cliente, integrándolos como elementos escultóricos dentro de la narrativa del diseño de la vivienda.
El estilo industrial se refuerza con una selección cuidadosa de materiales. Los detalles en bronce destacan en la escalera, la barandilla y la encimera de la cocina, aportando un toque contemporáneo y sofisticado a la vez que garantizan su durabilidad. Este enfoque se equilibra con suelos de madera cálidos, que suavizan los elementos industriales y dotan al espacio de una cualidad acogedora y táctil.
ESCALERA
DE ACERO
FLOTANTE
El interior está dominado por una escalera de acero flotante, un ejemplo de detalles refinados que combinan funcionalidad y estética. Conduce a la zona de estar principal, un espacio lleno de luz que irradia apertura y conectividad. Arriba, un lucernario corredero operado a distancia corona la terraza, una respuesta inteligente a las restricciones de altura impuestas por las normativas urbanísticas. Esta característica no solo mejora la terraza, sino que también demuestra cómo la tecnología puede superar desafíos espaciales en el diseño residencial.
La selección de materiales juega un papel fundamental en la unificación del lenguaje de diseño de la vivienda. Los detalles en acero bronceado añaden una sofisticación industrial, mientras que los suelos de madera aportan calidez orgánica, creando un interior cohesionado y armonioso. Cada habitación se siente intrínsecamente conectada, tanto en estilo como en funcionalidad, dando como resultado una residencia con un diseño tan cuidado como impactante.
El número 8 de Dunstable Mews es un testimonio del poder transformador del diseño innovador, donde la estética industrial y la tecnología de vanguardia convergen para crear un hogar visualmente fascinante y profundamente funcional.
